El Cisne Negro, supuesto nombre del barco hundido por el que la compañía Odyssey mantiene desde hace meses una pugna con el estado español, se llama en realidad Nuestra Señora de La Mercedes, y se trata de un barco español hundido en 1804 por los ingleses frente a las costas del Algarve. España confirma así sus sospechas de que el buque es español y que, por tanto, puede reclamarlo. La publicación en el diario El País de la posibilidad de que el pecio correspondiese a La Mercedes ha hecho que el juez Mark Pizzo, que lleva el caso en Tampa, obligara a Odyssey a hacer pública esta información, pese a que la empresa pretendía la confidencialidad de estos datos. Además de la hipótesis de La Mercedes, Odyssey ofreció también datos sobre otro pecio hallado en el Canal de la Mancha y que también era reclamado por España, el Merchant Royal, un buque inglés que naufragó tras una tempestad el 23 de septiembre de 1641.
El Gobierno está satisfecho con la decisión del juez y el Ministerio de Cultura está analizando exhaustivamente toda la información que posee sobre el Cisne Negro, incluido el informe de los expertos que estudiaron el material procedente del pecio. El juez ha dado de plazo a España hasta el 9 de mayo para que exponga sus conclusiones.
El Gobierno está satisfecho con la decisión del juez y el Ministerio de Cultura está analizando exhaustivamente toda la información que posee sobre el Cisne Negro, incluido el informe de los expertos que estudiaron el material procedente del pecio. El juez ha dado de plazo a España hasta el 9 de mayo para que exponga sus conclusiones.
Esperemos que este caso no quede impune y sea el último intento de expolio a gran escala de nuestro importantísimo patrimonio sumergido.
1 comentario:
Me gusta tu blog. Muy original es título. Te sigo. Tienes que poner más entradas.
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